La contaminación es la introducción de sustancias a un medio que provoca que este sea inseguro o no apto para uso.

Hay varios tipos de contaminación:

Atmosféricas : La presencia en el aire  de materias  o formas de energía que impliquen riesgo, daño o molestia grave para las personas y la naturaleza.
Hídricas:  Es una modificación de esta, generalmente provocada por el ser humano, que la vuelve impropia o peligrosa para el consumo humano, la industria, la agricultura, la pesca y las actividades recreativas,  animales y la vida natural.
Radiactiva: Presencia no deseada de sustancias radioactivas en el entorno.
Térmica: Se produce cuando un proceso altera la temperatura del medio de forma indeseada o perjudicial.
Acústica: Es el exceso de sonido que altera las condiciones normales del ambiente en una determinada zona
 Lumínica: Emisión de flujo luminoso de fuentes artificiales de luz nocturnas en intensidades, direcciones, rangos espectrales u horarios innecesarios para la realización de las actividades previstas en la zona en la que se instalan las luces.

Entre las causas de la contaminación están: desechos sólidos domésticos e industriales, excesivo uso de fertilizantes, tala. quema, basura, aguas negras, entre otros.

Prevención de la contaminación:  Podemos plantar árboles, controlar el uso de fertilizantes, no botar basura en lugares inapropiados, Las 3 erres (reciclar, reutilizar y reducir), crear conciencia ciudadana y muchos más.

Efectos de la contaminación: Deteriora cada vez más el planeta, atenta contra vida de animales, plantas y personas, contamina el agua y el suelo provocando que no se pueda consumir el agua y no se pueda sembrar en los suelos, cambios climáticos, destrucción del ozono...